Los
firmantes, representantes de las diversas organizaciones del pueblo
panameño, alertamos a nuestros compatriotas, a la comunidad
internacional y muy especialmente a la comunidad
latinoamericana y caribeña, de la escalada desestabilizadora y
francamente sediciosa contra el gobierno democráticamente constituido de
la hermana República Bolivariana de Venezuela.
Los acontecimientos de sabotaje económico de los últimos meses (acaparamiento, contrabando, manipulación de divisas, precios especulativos, etc.) y más claramente lo ocurrido desde el 12 de febrero a la fecha, develan que los planes antidemocráticos de la reacción venezolana siguen su curso, con tácticas y tiempos diferentes, pero con los mismos actores que se obstinan en retomar el poder político que han perdido en dieciocho de diecinueve elecciones, referéndums, consultas legítimas y legales durante quince años de proceso transformador.
El guion repite el objetivo del 2002, derrocar un gobierno democráticamente elegido, pero incorporando ahora nuevos elementos, que nos alertan de intentos de recrear en la patria de Bolívar condiciones para una guerra civil que justifique una intervención acuerpada por la ultraderecha internacional, similar a las muchas ocurridas últimamente alrededor del mundo y ninguna de las cuales ha concluido en paz y estabilidad para los pueblos, aunque sí en jugosos negocios para las corporaciones transnacionales.
Ahora más que nunca en Venezuela, al igual que en Honduras, Paraguay, Colombia, algunos países europeos y otros, árabes y asiáticos, se está jugando la suerte de la marcha democrática hacia la liberación social y nacional de los pueblos, frente a la crisis irreversible del capitalismo mundial neoliberal. Y es en este marco que, la embestida contra los movimientos populares exitosos, conducida directamente por el neoconservadurismo fascista, representación ideológica de lo más recalcitrante del capital financiero unido a la industria militar y al cartel mediático, se hace más peligrosa.
Este movimiento sedicioso internacional tiene el sentido de pegar en el corazón de lo que ha sido la fuente del consenso latinoamericano hacia una identidad propia, al margen de los intereses neocolonialistas dominantes. Se intenta no solo retrotraer a Venezuela a un pasado que no volverá, sino que claramente pretenden eliminar al principal motor del proceso de integración latinoamericana, con sus rotundos triunfos, como son el ALBA, el nuevo MERCOSUR, UNASUR, la CELAC, PETROCARIBE, TELESUR, etc.
A la sedición la acompaña y orquesta, un accionar mediático cartelizado, fuente de una desinformación mundial institucionalizada y especializada en tergiversar realidades y crear desasosiego, para así abrir los caminos que justifiquen nuevos golpes, invasiones y apoderarse luego de los recursos naturales y riquezas, como ya ha ocurrido en otros lares y en nuestro propio país, Panamá.
Ante los graves hechos que denunciamos y repudiamos, declaramos:
• Reafirmamos nuestra solidaridad militante con el pueblo y el gobierno legítimamente constituido de Venezuela.
• Ante una agresión contra la integración latinoamericana y contra los pueblos del mundo, que cada día se globaliza más, anunciamos la creación del Comité Bolivariano de Solidaridad Latinoamericanista, que hoy manifiesta su solidaridad con la amenazada revolución venezolana, y que se mantendrá activo y alerta, pues en la agresión a Venezuela se perfila un ataque contra la Unidad de la Patria Grande y las posibilidades de construir un nuevo mundo de igualdad y bienestar para todos.
• Llamamos a que se permita que los problemas de Venezuela se resuelvan entre los venezolanos, sin interferencias extranjeras.
• Convocamos a todos los panameños a identificar y desenmascarar la manipulación mediática, a quitarle el disfraz al fascismo con guantes blancos y a los ultraderechistas y paramilitares camuflados de demócratas.
• Repudiamos enfáticamente la violencia fascista desatada por la ultraderecha venezolana, que ha causado ya irreparables muertes, numerosos heridos y graves daños a la propiedad.
• Manifestamos nuestra absoluta confianza en las fuerzas de la razón, la democracia y el derecho, que acompañan y guían al gobierno y pueblo venezolanos en su senda de soberanía, justicia social e integración latinoamericana prevalecerán. Seguros estamos que ellas derrotarán al fascismo violento.
Condenamos la violencia desatada por la ultraderecha venezolana y sus aliados narco paramilitares, orquestados por el imperialismo internacional!
Viva la República Bolivariana de Venezuela, en estado de derecho, paz, democracia y revolución bolivariana!
Ciudad de Panamá, República de Panamá,
A los Cinco Días del Mes de Marzo de 2014
FIRMAN EN ADHESIÓN: Sindicato de Periodistas de Panamá, Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (FRENADESO), Sindicato Único de la Construcción y Similares (Suntracs), Frente Amplio de Colón, Copodehupa, FENASEP, Centro de Capacitación Social, Centro de Estudios Estratégicos, Central nacional de Trabajadores de Panamá (CNTP), Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá (APUDEP), Partido del Pueblo, Frente Amplio por la Democracia (FAD), Movimiento Independiente de Refundación Nacional (MIREN), Movimiento Alternativa Socialista (MAS), Sociedad Bolivariana de Panamá Oeste (SOBOLPO), Instituto de Estudios Políticos e Internacionales y siguen otras organizaciones.
Adhieren también una lista de más de 50 personalidades encabezadas por Juan Jované (candidato presidencial independiente), Fernando Cebamanos (Secretario General del partido Frente Amplio por la Democracia-FAD), Miguel A. Candanedo (Secretario General de la Universidad de Panamá), Norma Núñez Montoto, Filemón Medina, Gilma Camargo, Moisés Carrasquilla, Olmedo Beluche, Julio Manduley, Manuel Zárate, Jorge Aparicio, Ronaldo Ortíz, Robinson Hernández, Germán Chacín, José Alvaro, Abdiel Melo, Alfredo Berrocal y siguen más nombres.
Los acontecimientos de sabotaje económico de los últimos meses (acaparamiento, contrabando, manipulación de divisas, precios especulativos, etc.) y más claramente lo ocurrido desde el 12 de febrero a la fecha, develan que los planes antidemocráticos de la reacción venezolana siguen su curso, con tácticas y tiempos diferentes, pero con los mismos actores que se obstinan en retomar el poder político que han perdido en dieciocho de diecinueve elecciones, referéndums, consultas legítimas y legales durante quince años de proceso transformador.
El guion repite el objetivo del 2002, derrocar un gobierno democráticamente elegido, pero incorporando ahora nuevos elementos, que nos alertan de intentos de recrear en la patria de Bolívar condiciones para una guerra civil que justifique una intervención acuerpada por la ultraderecha internacional, similar a las muchas ocurridas últimamente alrededor del mundo y ninguna de las cuales ha concluido en paz y estabilidad para los pueblos, aunque sí en jugosos negocios para las corporaciones transnacionales.
Ahora más que nunca en Venezuela, al igual que en Honduras, Paraguay, Colombia, algunos países europeos y otros, árabes y asiáticos, se está jugando la suerte de la marcha democrática hacia la liberación social y nacional de los pueblos, frente a la crisis irreversible del capitalismo mundial neoliberal. Y es en este marco que, la embestida contra los movimientos populares exitosos, conducida directamente por el neoconservadurismo fascista, representación ideológica de lo más recalcitrante del capital financiero unido a la industria militar y al cartel mediático, se hace más peligrosa.
Este movimiento sedicioso internacional tiene el sentido de pegar en el corazón de lo que ha sido la fuente del consenso latinoamericano hacia una identidad propia, al margen de los intereses neocolonialistas dominantes. Se intenta no solo retrotraer a Venezuela a un pasado que no volverá, sino que claramente pretenden eliminar al principal motor del proceso de integración latinoamericana, con sus rotundos triunfos, como son el ALBA, el nuevo MERCOSUR, UNASUR, la CELAC, PETROCARIBE, TELESUR, etc.
A la sedición la acompaña y orquesta, un accionar mediático cartelizado, fuente de una desinformación mundial institucionalizada y especializada en tergiversar realidades y crear desasosiego, para así abrir los caminos que justifiquen nuevos golpes, invasiones y apoderarse luego de los recursos naturales y riquezas, como ya ha ocurrido en otros lares y en nuestro propio país, Panamá.
Ante los graves hechos que denunciamos y repudiamos, declaramos:
• Reafirmamos nuestra solidaridad militante con el pueblo y el gobierno legítimamente constituido de Venezuela.
• Ante una agresión contra la integración latinoamericana y contra los pueblos del mundo, que cada día se globaliza más, anunciamos la creación del Comité Bolivariano de Solidaridad Latinoamericanista, que hoy manifiesta su solidaridad con la amenazada revolución venezolana, y que se mantendrá activo y alerta, pues en la agresión a Venezuela se perfila un ataque contra la Unidad de la Patria Grande y las posibilidades de construir un nuevo mundo de igualdad y bienestar para todos.
• Llamamos a que se permita que los problemas de Venezuela se resuelvan entre los venezolanos, sin interferencias extranjeras.
• Convocamos a todos los panameños a identificar y desenmascarar la manipulación mediática, a quitarle el disfraz al fascismo con guantes blancos y a los ultraderechistas y paramilitares camuflados de demócratas.
• Repudiamos enfáticamente la violencia fascista desatada por la ultraderecha venezolana, que ha causado ya irreparables muertes, numerosos heridos y graves daños a la propiedad.
• Manifestamos nuestra absoluta confianza en las fuerzas de la razón, la democracia y el derecho, que acompañan y guían al gobierno y pueblo venezolanos en su senda de soberanía, justicia social e integración latinoamericana prevalecerán. Seguros estamos que ellas derrotarán al fascismo violento.
Condenamos la violencia desatada por la ultraderecha venezolana y sus aliados narco paramilitares, orquestados por el imperialismo internacional!
Viva la República Bolivariana de Venezuela, en estado de derecho, paz, democracia y revolución bolivariana!
Ciudad de Panamá, República de Panamá,
A los Cinco Días del Mes de Marzo de 2014
FIRMAN EN ADHESIÓN: Sindicato de Periodistas de Panamá, Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (FRENADESO), Sindicato Único de la Construcción y Similares (Suntracs), Frente Amplio de Colón, Copodehupa, FENASEP, Centro de Capacitación Social, Centro de Estudios Estratégicos, Central nacional de Trabajadores de Panamá (CNTP), Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá (APUDEP), Partido del Pueblo, Frente Amplio por la Democracia (FAD), Movimiento Independiente de Refundación Nacional (MIREN), Movimiento Alternativa Socialista (MAS), Sociedad Bolivariana de Panamá Oeste (SOBOLPO), Instituto de Estudios Políticos e Internacionales y siguen otras organizaciones.
Adhieren también una lista de más de 50 personalidades encabezadas por Juan Jované (candidato presidencial independiente), Fernando Cebamanos (Secretario General del partido Frente Amplio por la Democracia-FAD), Miguel A. Candanedo (Secretario General de la Universidad de Panamá), Norma Núñez Montoto, Filemón Medina, Gilma Camargo, Moisés Carrasquilla, Olmedo Beluche, Julio Manduley, Manuel Zárate, Jorge Aparicio, Ronaldo Ortíz, Robinson Hernández, Germán Chacín, José Alvaro, Abdiel Melo, Alfredo Berrocal y siguen más nombres.
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