Los niños y niñas nacieron para ser felices, brindar mucha paz, alegría y mi amor a todos por igual. Así lo calificó el apóstol y héroe de Cuba José Martí. En un sueño que se ha hecho realidad y que continuará creciendo aún más mientras la revolución cubana y los revolucionarios cubano continúen defendiendo y luchando por el legado histórico del hombre que hizo posible ese gran y hermoso sueño. Los niños cubanos, continuarán colmando de paz y cariño a muchos corazones como los embajadores de paz de Cuba ante el mundo, ellos son una muestra de lo que la revolución cubana hace por su pueblo y por sus niños.
Por Juan Carlos Díaz Osorio
Acaba de concluir la primera temporada de La Colmena TV, de la Televisión cubana, derroche de talento infantil y diversión. Desde los más pequeños hasta los adultos disfrutamos este programa, uno de los mejores que ha habido en los últimos tiempos para todo tipo de público. Que decir del escenario cada vez que los niños actuaban, nos hacía adentrarnos aún más en la actuación de los pequeños y vivirla. Quizás perfecto no fue, y detractores (como siempre) tendrá, pero que fue bueno no se puede negar y captó la atención de la audiencia.
Cremata nos dio, como es habitual, un hermoso espectáculo con niños para disfrutar en familia y divertirnos. No faltaron por supuesto, la transmisión de los valores humanos a los que no tiene acostumbrado Tin; sin dejar de mencionar el legado de nuestro Apóstol Nacional José Martí, que estuvo presente en cada uno de los programas incluyendo el último, y este es uno de los valores más grandes de La Colmena TV y de su director.
Esperamos una segunda temporada, igual o mejor, el público cubano, ansioso de este este tipo de eventos propios y no importados lo va a agradecer.
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