En la ciudad brasileña de
Tabatinga, en la Triple Frontera con Colombia y Perú, a partir de hoy se
simularán combates con la participación de tropas norteamericanas. La base
militar provisoria podría ser un mal antecedente regional.
Por Dario Pignotti

La operación AmazonLog 17
preocupa al Partido de los Trabajadores.
PáginaI12 En Brasil
Desde Brasilia
Brasilia, 4 de agosto de
2009. En la sede de la Presidencia el asesor Marco Aurelio García recibió al
general norteamericano Jim Jones para manifestarle su descontento por la
instalación de bases militares en Colombia. Al consejero internacional de Luiz
Inácio Lula da Silva le sobraban motivos para emplear un tono enérgico con el
enviado de la Casa Blanca: lo que estaba en juego era mucho más que la
discrepancia entre dos gobiernos sobre un asunto de coyuntura.
Implantar siete unidades
militares en Colombia, que comparte 1.644 kilómetros de fronteras con Brasil,
era un movimiento de piezas geopolítico del Estado norteamericano (un plan
seguido por los presidentes Clinton, Bush y Obama) engarzado en la estrategia
del cerco sobre la Amazonia, la cual se profundizará hoy a través del
desembarco de efectivos del Comando Sur en la ciudad brasileña de Tabatinga, en
la Triple Frontera con Colombia y Perú.