Esta postura del gobierno panameño se puede considerar como un acto de cobardía, se sumisión a las ordenes imperialista y de olvido de la historia, siendo Panamá uno de los países intervenidos e invadidos por el gobierno de los EE.UU. Pueblo que hoy reclama por el esclarecimiento e indemnización por los hechos genocidas cometidos contra un pueblo indefenso, que pago con vidas inocente la dictadura que en ese momento imperaba en la nación que fue alimentada y creada por el propio imperio del norte. Entonces nos preguntamos ¿Como es que el gobierno de Panamá puede atenerse de votar por la intervención a otra nación soberana con un presidente electo democráticamente por la mayoría de sus cuidadanos? Entonces, no cabe otro calificativo a la postura servil del gobierno panameño.
Por Osvaldo Rodríguez Martínez/ Prensa Latina
El gobierno de Panamá se abstuvo de firmar el comunicado del llamado Grupo de Lima (GL), que rechaza la opción militar contra Venezuela, confirmó hoy la Cancillería istmeña a Prensa Latina.
‘No había consenso y creemos que eso es importante para no debilitar el Grupo de Lima’, afirmó una fuente autorizada del Ministerio de Relaciones Exteriores, al exponer las razones de su autoexclusión, acompañada por Colombia, Canadá y Guyana.
Por su parte, Argentina, Brasil, Costa Rica, Chile, Guatemala, Honduras, México, Paraguay, Perú y Santa Lucía, son mencionados por el comunicado como quienes dentro del GL se distancian del uso de la fuerza para derrocar el Gobierno constitucional encabezado por Nicolás Maduro.
El grupo, habitualmente agresivo contra la administración bolivariana, señaló en el mensaje su ‘preocupación y rechazo ante cualquier curso de acción o declaración que implique una intervención militar o el ejercicio de la violencia, la amenaza o el uso de la fuerza en Venezuela’.
Aunque no se menciona en el documento, el cual reitera el actuar con apego al ‘derecho internacional’, es evidente que éste responde a las agresivas declaraciones de Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos, de no descartar ‘una intervención militar’ en Venezuela, para ‘derrocar’ a Maduro.
Al respecto, el presidente boliviano, Evo Morales, escribió en Twitter: ‘El llamado Grupo de Lima rechazó intervención militar contra #Venezuela y dejó solo en su obsesión golpista a Luis Almagro, agente servil del imperio. Es una derrota del intervencionismo de Trump y una victoria de la dignidad y coraje del Hno (hermano) pueblo venezolano y latinoamericano’.
Textos filtrados del Comando Sur de Estados Unidos, con fecha 23 de febrero de 2018, revelaron un plan invasor a Venezuela, donde las fronteras colombianas y su ejército desempeñarían un papel esencial como punta de lanza de una operación castrense, lo cual negó la nación sudamericana.
El documento titulado Masterstroke (Plan Maestro), aseveró que cuenta con la cooperación de las autoridades de los países aliados y colocó entre ellos a Colombia, Guyana y Panamá; en este último organizarían el aprovisionamiento, puestos médicos y la logística, con vigilancia e inteligencia electrónica desde Darién, según el plan.
Sobre la mención al Istmo, en su momento el ministro de Seguridad, Alexis Bethancourt, dijo desconocer al respecto, aunque los recientes ejercicios ‘humanitarios’ Horizontes, realizados por el ejército estadounidense, hizo maniobras en el extremo oriental, donde se ubica la selva de Darién.
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